En este espacio se compila el trabajo desarrollado por los participantes en la asignatura de libre elección Caminar Barcelona

03 marzo 2007

Cádiz

En Cádiz manda la derecha y Teófila Martínez quiere que se note. Si dios Hércules Fundador no lo remedia, el pleno municipal aprobará el día 19 una nueva ordenanza de circulación para que la gente ande por donde hay que andar: "por la acera de la derecha según el sentido de la marcha". Qué marcha, hija, Teófila, con esto de querer meterte hasta ese extremo en la vida de la gente. ¿Por qué no te dedicas mejor a iluminar por la noche la playa de la Caleta, que es la única que falta con alumbrado en plan Estadio Carranza en la final del Trofeo? Con haber puesto de dulce de Pastelería La Gloria por las noches las tres playas abiertas al Levante (la Playita, La Victoria y Cortadura) podías haberte quedado satisfecha. Pero tú, no, hala, a decirnos cómo hay que andar por Cádiz.
¿Y sabes cómo hay que andar por Cádiz, Teófila, hija, se ve que eres de la Montaña y no te acabas de enterar? Pues hay que andar embelesado... Ni por la derecha ni por la izquierda: embelesado. Engloriado con uno de los cascos históricos más importantes de las ciudades españolas. Absortos ante la belleza de esas largas calles (Sacramento, Rosario) con sus cierres blancos, con la torre-mirador que asoma allá a lo lejos, con ese bronce del cañón de esquina, con el mármol de Carrara de esa casapuerta, con la caoba de ese portalón, con la piedra ostionera de estas fachadas...

Lo peor de toda la ordenanza es lo de pararse a echar un ratito, un cigarrito, una charlita, un comentario, una cosa: "Los ciudadanos no deben detenerse en las aceras formando grupos que dificulten el tránsito de los demás vecinos". Tú lo que quieres es acabar con los que venden las caballas en los Callejones esquina Sagasta.
Así, parándose la gente en las aceras a comentar lo de la Constitución, es cómo nació en el Cádiz de las Cortes de 1812 el concepto contemporáneo de opinión pública. Tú no quieres facilitar la circulación: ¡tú lo que quieres es acabar con la opinión pública!
Claro que sé que en el fondo, Teófila, haces estas cosas por tu profundo amor al Carnaval. Sabes que los letristas de las agrupaciones están ya liados con los primeros cuplés del repertorio y eres tan generosa que ya les has dado hechos por lo menos treinta cuplés de medida, que son los más difíciles, después ya se le coge el tranquillo y es coser y cantar. (Por la derecha o por la izquierda, lo que no podrás impedir, oh Teófila, es que las calles de Cádiz sigan siendo esa maravilla que llevan todas al mar.)
Antonio Burgos, Las calles de Cádiz.

¿Donde está el centro?

¿Por que comenzar el recorrido de una ciudad por su centro histórico?
Podría ser simple casualidad o una inconsciente predilección por parte de la persona que elige, pero en cierta manera, es lo más lógico. Ciutat Vella es, en general, la parte más conocida por nosotros a todos los niveles…vamos a dibujar con la escuela, a comprar, quedamos con los amigos, salimos de fiesta, es quizá el primer sitio que visitamos cuando llegamos a la ciudad, la parte más accesible, la más promocionada…Es el centro; tan tópico en las ciudades europeas que cuando vamos a otros lugares y no lo encontramos, al menos yo, me siento desconcertada. ¿Que catalán no pregunta cuando sale fuera de su país y llega a otra ciudad: “donde está el centro?”.
Pero, no es tan sólo una parte histórica, es un espacio emblemático y reconocido por los que vivimos aquí y un núcleo sólido que nos ayuda a entender y articular la ciudad. Además, Ciutat Vella es el origen, la primera escala: la escala de las personas y de los carros, no la de los coches. Por eso, pienso que también era interesante conocerla en primer término, para tener una referencia clara en nuestras visitas posteriores; ya que como se dijo en el taller, cuando visitamos otros lugares, lo que hacemos es comparar con lo que ya conocemos.

Pienso que el encanto de la zona reside en sus calles y espacios, y no en los monumentos o edificios emblemáticos. La gente pasea Ciutat Vella. La catedral, casi ni se ve. Y el Ayuntamiento, por supuesto, bien que refuerza los recorridos que le interesan. Aunque parezca un maremagno de calles iguales, en mi opinión, hay ciertos recorridos marcados en Ciutat Vella que están muy adecuados y bonitos, mientras que su parte posterior, o la parte que menos se ve, y por tanto menos transitada, está muy deteriorada. Es verdad, la idílica imagen que se nos enseña de Ciutat Vella son sus calles retorcidas y angostas, las plazas imprevistas e irregulares, el ambiente encantador y relajado; pero hay más detrás de lo que vemos: también son viviendas insalubres, oscuras y viejas; calles estrechas y tétricas llenas de ropa tendida en los balcones, olor a basura y orín, inseguridad y ghettos…
En el taller anterior, se habló del edificio como fachada, criticando los esfuerzos por maquillar el exterior de cara al público. El día del paseo, me di cuenta que casi no había estado por la parte superior del Born (de la calle Princesa hacia arriba), mucho menos cuidada que lo otro. Ví el “forat de la vergonya” otra vez, siempre está igual y me pregunté si algún día harían algo o si siempre parecería la parte posterior de un escenario. Por otra parte, es de “halagar” la actuación del Ayuntamiento. Todos los turistas saben donde está el centro, pero cuantos de ellos conocen el “forat de la vergonya”? La gente está en la plaza de la catedral, ve las formas psicodélicas del mercat de Santa Caterina a lo lejos que consiguen atraerle, como a un niño un caramelo. Pero una vez allí, no hay nada que te incite a adentrarte más allá. Y la gente curiosa que lo hace y llega a ver el “forat de la vergonya”, seguro que da media vuelta, pensando: “ui, me he equivocado!” como cuando uno se equivoca y entra a los baños de las chicas. Pienso que es una estrategia exitosa de refuerzo y desviación hacia recorridos preparados y adecuados y de ocultamiento de las zonas más desfavorecidas de la ciudad, que seguro les sale más barata que reformar. Es más fácil y barato tapar lo que no se quiere enseñar que arreglarlo. Pienso que en general, hay una fórmula que define esta área: más turismo o más presión vecinal = más reformas.

Respecto al recorrido en general, pienso que fue interesante porque se nos enseñó las dos caras de la moneda del barrio. Aunque ya hubiera paseado la zona, creo que es diferente pasearla mientras alguien te explica la historia del lugar porque ayuda a entenderlo un poco más. De todas formas, aunque fue imposible debido a la falta de tiempo, me hubiera gustado hacer también un paseo por el Raval.

Prestigio de Ciutat Vella en dos generaciones

El otro día mi madre me preguntaba "porqué los jóvenes veis tanto atractivo en Ciutat Vella?". No podía entender que su generación y la de sus padres huyera de la antigua ciudad emmurallda y nosotros estubiéramos dispuestos a pagar mas para poder vivir ahí.
No podía entender que, cuando ella era una niña, CV estubiera en mucho mejor estado de como está ahora y fuera rechazada y, la mayoría de jóvenes de hoy, apreciáramos CV como ninguna otra parte de BCN.
No podía entender que antes fuera señal de prestigio poder escaparse de CV i, ahora, (exceptuando algunas zonas) la distinción social viniera dada por tener un pisito en el Raval.
Yo le dije "CV tiene un encanto especial". Le hablé de la história que se veía implicita en muchos rincones de CV; de las calles laberínticas en que la luz va entrando de distintas formas y que nunca sabes lo que te encontrarás al girar la esquina siguiente; de la falta de coches (por lo menos falta de atascos) y la presencia de grupos de gente de todas edades, niños y viejos, jugando, paseando, leyendo,... ; de la escala humana de sus calles y edificios; de ...
Aún así, no logré convencerla. No cambiaría jamás un piso en Sant Gervasi (por ejemplo) por una en CV.
Luego, ya a solas, empecé a plantearme como podía ser que, si mi madre me ha educado a mi, tengamos criterios tan distintos en este sentido. Quién ha hecho que los barcelonenses vuelvan a CV?
Lo único que pude pensar es que es un circulo cerrado: nuestros abuelos y bisabuelos se cansaron de vivir comprimidos entre calles estrechas (aunque con muchos otros valores) y, nosotros, nos hemos hartado de vivir en cómodas calles anchas (con sus ventajas, por supuesto). No lo sé, quizás nuestros bisnietos vuelvan a despreciar el casco antiguo de la ciudad que nosotros tanto queremos y disfrutamos.

La Habana

En la parada de guaguas del muelle de Casablanca, un peludo esperaba solitario cualquier ómnibus. Tanta era la mariguana y el ron que había ingerido que no tenía idea de su destino, sólo sospechaba que tenía que salir de aquel marasmo. Le di un chapuzón en el agua turbia y apestosa del malecón, brillante de residuos de petróleo. Después me paré en el medio de la avenida, y sacándome un pezón conseguí botella en el auto de un General. Expliqué que mi hermano sufría de una fuerte crisis asmática y había que correr al hospital. Nos dejó en el cuerpo de guardia del Calixto García. De allí, una vez que la chapa del auto del general desapareció, bajé al arrastrando al peludo hasta la Red, un night-club oscurísimo del centro del Vedado. Se llamaba Machoqui, y en pleno año setenta y cinco se había propuesto ser hippie cuando ya nadie en el mundo, y mucho menos en Cuba, lo era.

La nada cotidiana_Zoé Valdés.

02 marzo 2007

La Otra Ciudad ; Tokyo



El último edición del mapa oficial de Tokio, tiene más de dos cintas paginas, ninguna parte menciona el fracasado American street plan*. Pregunta a taxista que te lleve a la calle Yoyogi y negará con la cabeza tristemente. Para él Yoyogi es una zona, no es una calle!! (* en la post-guerra de los Estados Unidos intentaba nombrar las todas calles de las ciudades.)

The Kimono Mind, ,1965 por Bernard Rudofsky


Si estoy en una ciudad occidental, tengo que buscar un nombre de la calle y un número de la casa. El nombre de la calle será poner una señal pequeña horizontalmente, como está sujetado cualquiera del muro del edificio que está en esquina o una pilar que está de pie en esquina de la calle.
(…)
Sin embargo, en la ciudad japonesa, no puedo encontrar ningúna señal horizontalmente. Pero puedo buscar un señal vertical que siempre está sujetada en uno del lado de las calles o en el muro del edificio que está en la calle anónima. (…) La señal te enseña el número del ”Chome” que es una zona ; que tiene diferentes manzanas, el nombre de ”machi” es la más grande zona que hay dentro del nido del Chome.

Aprendido de la ciudad japonesa,1999
Barrie Shelton

Ciutat Vella

La mayoría de veces que visito esta parte de Barcelona, mi recorrido empieza desde Plaza Cataluña, y va descendiendo. El descenso siempre es distinto, ya que, como si de un árbol genealógico se tratará, el casco antiguo se va ramificando en infinitas calles cada vez más estrechas y laberinticas. Supongo que perderse es fácil si no conoces el "funcionamiento" de Ciutat Vella: guiarse por la inclinación de las calles, diferenciar lado derecho, de lado izquierdo de las Ramblas (o como dirian mis abuelos: de lado peligroso, de lado bueno), la dimensión de las calles, la luz directa que les llega,... pero sobretodo, los distintos "items" que tiene todo el mundo para guiarse por los mundos.
Pues bien, esta parte de Bcn, es el sitio por excelencia de los "items"; de referencias que van cambiando, en la que sin querer o queriendo nos fijamos. Ya sean edificios de siempre como la Catedral de Barcelona, la Generalitat, el Ayuntamiento, la Catedral del Mar, la Boquería, el Liceo,... como el MACBA, el CCCB, la nueva UB, el mercat de Santa Caterina, el centro de Santa Mónica,... pastelerías, chocolaterías, mercerías, filatélias, jugueterías, ferreterías, restaurantes, bares, discotecas, etc, etc.... o incluso sitios personales que nos recuerdan a algun momento de nuestro,...
Creo que cuanto más nos hacemos de este barrio, más personal lo hacemos, pues a todos nos ofrece algo por el gran encanto que desprende. Es un barrio de constante cambio, pero a pesar de ello, aunque hayan cosas que nos gustan más y otras menos, no dejamos de estar enamorados de Ciutat Vella.

01 marzo 2007

Palermo


Siempre ha sido esta ciudad, bellísima y deshecha, un crisol de civilizaciones y culturas, de razas y lenguas, de razones y religiones, de estructuras y ornamentos, de armonías y locuras. Palermo es la síntesis de la isla cuya capital ha sido y es. Y la isla, Sicilia, es el contraste más vistoso de naturaleza y cultura, caos y orden universal. Sí, sin Sicilia no puede entenderse Italia, no puede entenderse ese lugar antiguo, cambiado y cambiante, que se llama Mediterráneo. Dice también Göethe: “Sicilia es para mí un preludio de Asia y África, y hallarse en persona en este maravilloso centro en el que convergen tantos rayos de la historia universal no es cosa pequeña”.
Aquí, a Sicilia, llegaron muchos rayos luminosos de la historia que, después de emitir extraordinarios destellos, se apagaron. Y es verdad que en Palermo, en algún subterráneo derrumbado y oscuro del palacio de los Normandos, la Zisa, el Steri o la Martorana, en los comedores de algún fastuoso palacio barroco, podía ocultarse el prodigioso Aleph: el lugar que contiene todos los lugares, la historia que contiene todas las historias.
Vincenzo Consolo, Siciliano, ‘El pasmo de Palermo’; editado por Debate.

He elegido este troso porque lo que prefiero de mi ciudad y que queria evidenciar es que por Palermo se pueden hacer caminos varios y muy diferentes se pueden hacer: la “ruta romanica y bizantina”, la “ruta musulmana”, la “ruta barroca”, la “ruta espanola”… se pueden percorrer todos los caminos hechos por todos las civilizacìones que la han atravesada y conquistada.La foto se refiere a la Catedrale de Palermo, exemplo concreto de la union de los estilos que cada civilizaciones ha anado en su cruzada por la ciudad.

Estambul

“Pero ahora estoy intentando hablar no de la melancolía, sino de la amargura, que tanto se parece con aquella, y que nosotros asumimos con orgullo y que compartimos como comunidad. Eso significa que hay que observar los lugares y los momentos en que se confunden el sentimiento mismo y el entorno que hace que la ciudad lo siente/ Hablo de los padres que regresan a casa con una bolsa en la mano bajo la luz de las farolas suburbiales en noches que caen demasiado pronto. (…) de los marineros que, cubo en mano, limpian los viejos vapores del Bósforo amarrados a muelles vacíos con un ojo en la lejana y pequeña televisión en blanco y negro y que poco después se quedarán dormidos en el barco; de los niños que juegan al fútbol entre los coches en estrechas calles adoquinadas; de las mujeres de cabeza cubierta que llevan bolsas de plástico y que en remotas paradas esperan sin hablar entre ellas, un autobús que nunca llega; de las vacías casetas de los caiques de las antiguas mansiones; (…) de las entradas de decenas de miles de bloques de pisos todas iguales; de las mansiones hijas de palacios en las que cada tabla del suelo gime con un crujido ahora convertidas en dependencias del ayuntamiento; (…) de las murallas de la ciudad, ruinosas desde los tiempos de Bizancio; de los mercados que se quedan desiertos por las noches;(…) de los miles de casas cuyas fachadas han perdido el color por la suciedad, el óxido y el hollín; (…)de las multitudes masculinas que pescan desde el puente de Gálata;(..) de los fotógrafos callejeros; (…) da las calles en las que no puedes ver ni una sola mujer en cuanto se pone el sol; (…)de los carteles de los muros, rotos y garabateados por todas partes; (…)de las mezquitas a las que les roban continuamente los caños y el plomo que recubre las cúpulas;(…) de las torres el reloj que nadie mira; (…) de los pasajes subterráneos en los lugares más frecuentados de la ciudad; (…) del hombre que desde hace cuarenta años vende en el mismo sitio postales de Estambul(…).”

(Estambul – Ciudad y Recuerdos. Orhan Pamuk)

El autor ha realizado estudios de arquitectura y periodismo y escribe este libro como “un retrato, en ocasiones panorámico y en otras íntimo y personal”. Muchas de las memorias que tiene de la ciudad están relacionadas con los recuerdos de su cotidiano en ella.

El recorrido que hace no es linear. Se parece mucho con “flashes” de una cámara fotográfica y por eso me encanta. Las fotografías que hace – en su y en mi mente - presentan una Estambul que solo conocen los que de allí son, y allí viven.

Me hace pensar: ¿podría encontrar en otras ciudades un sentimiento común entre todos? En Barclona, por ejemplo ¿cuál seria?

Y ¿como podríamos caminar por Barcelona a través de un recorrido no linear?

Iruña-Pamplona


FIESTA (Sun Also Rises)

''Ernest Hemingway''

...a lo lejos, levantándose sobre el llano, se divisaba la altiplanicie de Pamplona, con las murallas de la ciudad vieja, la gran catedral parda y la escarpada silueta de las otras iglesias recortándose contra el cielo. Detrás de la altiplanicie había montañas; las había por todos lados, a donde quiera que uno mirara.
[...] Entramos en la ciudad por el otro lado de la meseta. La carretera era empinada y polvorienta, con dos hileras de arboles para dar sombra; luego, al entrar en la parte nueva de la ciudad, construida fuera de las viejas murallas, se aplano. Pasamos por delante de la plaza de toros, alta y blanca; a la luz del sol parecía de hormigón. Luego tomamos una calle secundaria que nos dejó en la gran plaza, y paramos delante del hotel Montoya.

Caminar más :-)

Un colega mío de la Uni en Praga me contaba sobre sus estudios a la escola de arquitectura en Vallés ( 2 anos antes ) donde frecuentó un curso de recorridos por Barcelona con profesores de arquitectura. Esas classes me han parecido muy interesante, pues he buscado por una asignatura similar ya en el primero semestre de este ano. Por suerte la oncontró en el segundo! A mí me gusta la occasión a descubrir la cuidad con ojos de arquitectos, artistas y otra gente del lugar. Además será seguramente interesante probar a colaborar con alumnos de otras partes del mundo al fin de este curso.
Vino de Praga, la capital de República Checa. Mi cuidad de origen está, tal como Barcelona, llena de hermosos edificios y muchisimas bellezas arquitectonicas, pero desgraciadamente también de masas de turistas.
Caminando por las calles de Praga, encontrando muchos extranjeros siempre pensaba cuantos maravillosos detalles de mi cuidad nunca vieron y nunca pueden ver y entender. Sea por el motivo del tiempo o sea por falta de infornaciones.
Pues, porque soy ahora Yo el extranjero en una cuidad extrana-en Barcelona, me gustaría a eliminar ambos aspectos disonantes del descubrimiento mío:-) Creo que tuvo, y felizmente siempre tengo bastante tiempo para recorer la cuidad. Como me faltan todavía muchas informaciones sobre relaciones entre cosas, que he visto antes. Entonces elegí Caminar BCN, para saber más de la cuidad de Barcelona.

NYC NCY YCN CYN YNC CNY


En el cruce de la avenida Amstedam y la calle 116 la catedral gótica de Saint John the Divine está siendo todavía construida, y la fuerza ascensional de los nervios de piedra se corresponde con la de las grúas formidables que rodean la cúpula inacabada. En una sinagoga decrépita del Lower East Side descargadores chinos menudos y veloces van almacenando cajas de productos importados de Shanghai o de Hong Kong. En la calle Bowery, junto a los últimos hoteles para borrachos terminales que aún sobreviven, ya empiezan a abrirse restaurantes de lujo. Hace años los chinos desbordaron la frontera de Canal Street, y ahora se percibe físicamente su avance sobre las que fueron calles italianas y judías, y los letreros chinos y las pescaderías y ferreterías chinas van subiendo hacia el norte, inundando las fachadas sucias de la Bowery. Grandes carteles de liquidación por quiebra cruzan los escaparates de todas las tiendas de una cadena de perfumerías que hasta hace nada eran la última moda de la ciudad. Las estructuras metálicas de los puentes, sus haces y redes de cables de acero, muestran al desnudo los juegos de fuerzas de su construcción, las violentas concentraciones de energías necesarias para que se sostenga su firmeza. Todo está sucediendo simultáneamente y todo es visible, como las corrientes poderosas y los flujos contrarios de las mareas en las aguas oceánicas del Hudson y del East River, que algunas veces arrastran hacia el mar árboles desgajados de las orillas boscosas. En un teatro de Broadway, bajo el suelo inclinado del patio de butacas, se percibe la vibración de un convoy del metro. El asfalto de las calles tiene jorobas, hondonadas, zanjas cubiertas por planchas metálicas, estrías ásperas sobre las que rebrotan los neumáticos de los taxis. Por una brecha entre la calzada y la acera se escapa una columna densa de vapor, como en esos parajes volcánicos donde sólo una corteza frágil impide la erupción de los fuegos centrales de la Tierra. En Central Park, hacia la esquina del sudeste, donde hasta hace una semana hubo un lago bucólicamente rodeado de árboles otoñales que se reflejaban en la lisura del agua, ahora hay un socavón de cieno negro en el que se afanan violentas palas de escavadoras y camiones con remolques. El patio de las esculturas del Museo de Arte Moderno es un solar en obras, y dentro de poco el edificio entero va a ser cerrado para una remodelación que durará años. En Times Square los edificios banales de vidrio y metal reluciente se levantan casi a la misma velocidad a la que cambian las imágenes en los monitores gigantes de televisión, y más o menos con la misma consistencia estética. Torres de cristal con ángulos caprichosos, supermercados de bagatelas electrónicas, letreros deslizantes, pantallas con anuncios o imágenes de noticiarios transfiguran Maniatan en un cruce entre Las Vegas y una babilonia asiática, en un laberinto sin sosiego ni centro, sin más huellas del pasado, salvo el edificio del New York Times, que algún recodo de penumbra y ruina sobre el cual aún no se han abatido las escavadoras. El edificio del Times es una gigante magnífico y sombrío, como una divinidad arcaica, aunque pertenezca a una modernidad todavía reciente, con sus terrazas escalonadas y su gran faro en la cima. Entre la gente que llena las aceras y cruza los semáforos con un desorden de manadas reconozco de pronto a un conocido: un individuo vestido de negro que levanta, con el brazo rígido y extendido, una gran Biblia abierta sobre su cabeza, y en la otra mano lleva un trozo de cartón con un letrero escrito a mano, con tinta roja y caligrafía gótica: El viento del fin del mundo ya está soplando. En la isleta donde se cruzan Broadway y la Séptima Avenida han levantado un escenario unos activistas negros que pregonan la maldad de Israel, vestidos a medias de egipcios de Aida o de Los diez mandamientos y de chulos de putas, con muchos oros en los torsos fornidos, gafas reflectantes y tocados faraónicos. Una mujer vieja, diminuta, despeinada, reparte octavillas con oraciones escritas en pareados y citas del Antiguo Testamento. Un calígrafo chino dibuja con pinceles de acuarelas mariposas y pájaros que se convierten en nombres de personas. En un quiosco donde belicosos titulares proclaman la victoria militar en Afganistán se vende el último número de la revista Hola. En medio de un círculo de gente unos chicos muy jóvenes se contorsionan, giran en el aire apoyándose en una sola mano, dan volteretas imposibles siguiendo el ritmo de un cinta de hip hop que retumba en un radiocasete grande y destartalado como una maleta. Un tipo vestido sólo con unos calzoncillos, sombrero tejano y botas repujadas de cowboy canta y toca una guitarra que nadie escucha entre el ruido del tráfico. En la espalda desnuda y musculosa lleva escrito o tatuado un letrero: The naked cowboy.

MUÑOZ MOLINA, Antonio. Ventanas de Manhattan. 2006. Editorial Seix Barral. (pág. 254 -257)

28 febrero 2007

Lille


Viví en lo mismo 26 cocea del « Marais » los dos primeros inviernos de mi vida: todavía debo tener en el fondo de mis huesos algo del calor de su estufa. Nieta, regresé allí a dos o tres recuperaciones visitar a mi abuela, en primavera, cuando ésta todavía no estuvo instalada al « Mont-Noir » , o por los primeros fríos, cuando había vuelto en la ciudad. Sentía vagamente la atmósfera abandonada de esta casa de vieja dama que no recibe casi. Reparo en el fondo de mi memoria en las marchas de marmol de una escalera, una rampa que giralos grandes árboles de espacioso jardín, y una galería sobre soportales que debió recordarle a Michel-Charles los pórticos romanos del siglo XVIII.Estas moradas grises, un poco frías, impecablemente tiradasal cordel, del tiempo de los Intendentes franceses también, que reemplazaron en Lila la vieja vivienda a aguilones esculpidos y dorados de los dueños de obra de los duques de Borgoña, tienen su misterio. La leyenda quiere que esta casa, antes de pertenecer a Señor de Rouvroy, hubiera sido el hotel lujoso de un tratante que albergaba allí a chicas de ópera.
Marguerite Yourcenar,
Archives du Nord (Lille), Gallimard, 1977, pp175-176

27 febrero 2007

Andorra la Vella

“Más me preocupa que los andorranos, deslumbrados por el fulgor del dinero fácil que habéis perseguido las últimas década, trastocados por unas ambiciones cada vez más urgentes y sofisticadas, ya no seáis capaces de ver el viejo pastor. Que lástima, que pérdida tan irreparable,… si por el afán de ganar riqueza o poder, el país se llena de edificios vulgares, se devasta la naturaleza y se corrompe la tranquilidad y la dimensión humana de sus pueblos”

"La República invisible" de Joan Peruga, ed.Proa 2004

por qué caminar?

¿porqué caminar ?

a un amig@ que parte de viaje…
camina, pasea, explora la ciudad, actúa con la mirada transformando el paisaje urbano de tus pasos al azar, construyendo con sueños la realidad…
pregunta y siente la historia de las piedras, aprende el valor sentimental que desprenden y abandónate a una deriva sin meta…

¿porqué barcelona?
ideal para caminar, pasear, explorar…
las calles de ciutat vella que invitan a deambular y perderse para nunca repetir el mismo recorrido, noche de colores y sabores, día en busca del rayo de sol que se descuelga por las fachadas buscando un poco de calle o plaza para calentar…
el raval, babel que tanto interesa a los viajeros…
gracia, pueblo de generaciones…
l’eixample, ideal para las clases de urbanismo y el bar de la esquina…
sarrià, palacios para las novelas y el olvido, sants, les corts, noubarris, el paral·lel, el mar…

¿por qué caminar bcn?
porque no?!

Las otras ciudades. Tarragona

La escarpada roca asciende, a manera de grandioso baluarte, desde la costa hasta la vieja ciudad que la corona, dominando en gran extensión mar y tierra. Por la parte del mar han sido derribadas las fortificaciones , abriéndose en su lugar un magnífico paseo, por el que el pueblo de Tarragona circula entre palmeras, disfrutando del sol. De su admirable perspectiva marítima recibe este paseo el nombre de “Balcón del mediterráneo” y es uno de los más hermosos paseos que pueden encontrarse en el más bello de los mares. Todos los días me quedaba en él en la hora del atardecer, “paseando”, como dice el español, “ambulando”, decía el romano, a quien vagar agradaba tanto como a los meridionales de hoy. Pero cuando más me placía el “Balcón del Mediterráneo” era muy de mañana, en aquellas horas en que este querido lugar nos pertenecía por completo. Tan sólo una joven pareja se hallaba en él, con regularidad semejante y con el mismo fin de soledad.

En mi primera visita, algo larga, a Tarragona, en el año 1920, estuve alojado en la calle de la Nao, núm. 11 sobre el muro del Palacio de Augusto, en sitio, por siguiente, grato al arqueólogo. ¡Calle de la Nao, número 11, casa quieta sobre el viejo muro romano, tu recuerdo será grato al huésped nórdico, pues le ofreciste agradable estancia! Allí encontré de nuevo a un antiguo amigo. ¡José de Pazos, “hijo de Portus Menesthei” (cerca del Puerto de Santa María, prov. de Cádiz), como gustoso te apellidabas, retoño de Andalucía, amable hablador, nadie como tú me hizo tan gratas las semanas en Tarragona, ora comiendo juntos en la pequeña mesa de doña Pepita, ora en nuestros paseos de cada tarde por las estrechas calles o por la ancha Rambla!

Desde mi habitación, que recibía sol desde la mañana hasta la noche, la vista era magnífica. Hacia la izquierda se veía la extensa costa rocosa hasta la Punta de la Mora; hacia la derecha, la amplia llanura con blancas masías y oscuros pinos, que se extiende hasta el cabo de Salou y más allá todavía, hasta el Montsiá, cerca de la desembocadura del Ebro.

ciudad potemkin



Quien no los conoce, los pueblos de Potemkin, que el astuto favorito de Caterina había construido en Ucraina? Pueblos de tela y cartón, con el fin de transformar ante los ojos de su majestad imperial un desierto en un paisaje floreciente…
la ciudad Potemkin que quiero comentar ahora, es la nuestra querida Viena…
Cuando paseo por el Ring tengo siempre la impresión que un Potemkin moderno haya querido realizar la la empresa de encontrarse en una ciudad habitada solo por nobles.

Adolf Loos, La ciudad Potemkin, 1898


El Barri de Sants - Fred als peus


“Fred als peus” de Àngel Casas

Ed. Quaderns Crema 2002. Pàg 206-207

Explotaban los petardos por la calle a nuestro paso. A ella le daban un poco de miedo los truenos cuando petaban a traición. Pero yo la cogía por los hombros y le decía que aquella noche yo la protegería. Subíamos por la calle San Crist sin hablar de nada en concreto: de los exámenes, de la coca de piñones, ... En la plaza Iberia, la de detrás de la iglesia, quemaba una pequeña hoguera que se consumía, y algunos grandullones la saltaban. Caminamos poco a poco hasta la plaza de al lado, la de l’Església, o Iclésia, o Málaga, o Bonet i Moixí, que era la mía. Allí la hoguera era más grande y más entera. Saludamos a amigos y vecinos y nos quedamos un rato mirando la danza de las llamas.

Y encendimos unos petardos, ella también, comimos un trozo de coca y bebimos un trago de moscatel del porrón. Y arrastrando los pies como quien no tiene ganas de partir, nos alejamos de la gente y la hoguera hacia la casa de Esperanza. Carretera de Sants arriba, cerca de la entonces plaza del Niñu, como le llamaban al cruce de Badal con la Carretera, porqué havia una fuente coronada por una pequeña estatua de un niño meando, como la de Bruselas.

MÉXICO DISTRITO FEDERAL


Crónica de la Ciudad de México
EL LIBRO DE LOS ABRAZOS
por Eduardo Galeano

Medio siglo después del nacimiento de Superman, en Nueva York, Superbarrio anda por las calles y las azoteas de la ciudad de México. El prestigioso norteamericano de acero símbolo universal del poder, vive en una ciudad llamada Métropoli. Superbarrio, cualunque mexicano de carne y hueso, héroe del pobrerío, vive en un suburbio llamado Nezahualcóyotl.
Superbarrio tiene barriga y piernas chuecas. Usa máscara roja y capa amarilla. No lucha contra momias, fantasmas ni vampiros. En una punta de la ciudad enfrenta a la policía y salva del desalojo a unos muertos de hambre; en la otra punta, al mismo tiempo, encabeza manifestación por los derechos de la mujer o contra el envenenamiento del aire; y en el centro, mientras tanto, invade el Congreso Nacional y lanza una arenga denunciando las cochinadas del gobierno.

Estocolmo


"Desde Götgatan girabamos a una bocacalle que nos llevo a la plaza Mosebacke - uno de los centros clasicos del ocio Estocolmo. Despues rodeabamos bajando un callejón sinuoso por encima de los adoquínos. Parabamos en frente de un edificio alto de color verde claro que se distinguió notablemente de sus entornos. Adivinaba que la casa fue construido cerca el principio del siglo. La fachada, rico de ornamentaciónes, estaba de revoque perfectamente nuevo, y con puerta y ventanas que todas mostraban que el edificio había estado reformado nuevamente. El numero 9 dorado estaba puesto por encima de la puerta de cristal relumbrante."

Stieg Trenter, Estocolmo. "Hoy rojo...." (1945)

Paris

"C'était une de ces soirées d'été où l'air manque dans Paris. La ville, chaude comme une étuve, paraissait suer dans la nuit étouffante. Les égouts soufflaient par leurs bouches de granit leurs haleines empestées, et les cuisines souterraines jetaient à la rue, par leur fenêtres basses, les miasmes infâmes des eaux de vaiselle et des vieilles sauces. (...)
Il tourna vers la Madeleine et suivit le flot de foule qui coulait accablé par la chaleur. Les grands cafés, pleins de monde, débordaient sur le trottoir, étalant leur public de buveurs sous la lumière éclatante et crue de leur devanture illuminnée. Devant eux, sur de petites tables carrées ou rondes, les verres contenaient des liquides rouges, jaunes, verts, bruns, de toutes les nuances; et dans l'intérieur des carafes on voyait briller les gros cylindres transparents de glace qui refroidissaient la belle eau claire. (...)
Quand Georges Duroy parvint au boulevard, il s'arrêta encore, indécis sur ce qu'il allait faire. Il avait envie maintenant de gagner les Champs Elysées et l'avenue du Bois-de-Boulogne pour trouver un peu d'air frais sous les arbres; mais un désir aussi le travaillait, celui d'une rencontre amoureuse."

Bel Ami, Guy de Maupassant.


"Era una de estas tardes de verano en las cuales el aire falta en Paris. La ciudad, calorosa como una estufa, parecía sudar en la noche sofocante. Las goteras respiraban por sus bocas de granit sus aliantos, y la cocinas subterranea lanzaban en la calles, por sus ventanas bajas, las miasmas infames de las aguas sucias de las lavadoras y de las viejas salsas. (...)
Vuelto hacia la Madeleine y sigó la gente que fluío brumada por el calor. Los grandes cafés, llenos de mundo, desbordaban en la acera, muestrando su publico de bebedores sobre una luz esplendente y cruda de sus delenteras iluminadas. Delante de ellos, sobre pequeñas mesas cuadradas o rondas, los vasos cabían liquidos rojos, amarillos, verdes, marrones, de todos tipos de colores; y al interior de las garrafas pudimos ver brillar los gruesos trossos de hielo que enfrían el agua clara. (...)
Cuando Georges Duroy llegaba en el 'boulevard', se paró una otra vez, indeciso sobre lo que quería hacer. Ahora tenía ganas de ir al los 'Champs Elysées' y seguir por la avenida del 'Bois-de-Boulogne' para tomar aire fresco bajo de los arboles; pero ademas un tenía un deseo, el de tener un 'rendez-vous'."

Explicaciones:
He elegido este extracto porque me gusta esta vision calorosa de Paris. En efecto, la mayoria de le gente dice que Paris es "frio"; puede ser, pero existe tambien un Paris animado. Este extracto presenta un momento en Paris que me gusta, como dia de verano y fin del dia, cuando la gente se encuentra en la terrazas de los cafés de la grandes avenidas para descanzar y enfriarse. Tambien, muestra el Paris lleno de mundo, un Paris loco, el Paris que me gusta.
Ademas, es un barrio de Paris que conozco mucho.

CIUTAT VELLA VS ZOCALO

Bueno pues. Si la tarea es encontrar diferencias entre el centro de Barcelona y el Centro del DF (zócalo) no acabaría nunca. Sin embargo, con un pequeño párrafo trataré de explicar a que me refiero.
En 1521 los españoles conquistaron Tenochtitlan (Cd. de México) y arrazaron con todos los monumentos existentes edificados por los indígenas. Encima colocaron iglesias y borraron por la fuerza a una cultura que para su tiempo y su lugar fueron muy poderosos; a los mexicas. El zócalo es una gran plaza ubicada en el centro de la Ciudad de México. Imponente, se alza frente a ésta la catedral metropolitana, edificada encima del Templo Mayor Mexica. Al recorrer uno el centro del DF, pareciera que su historia comienza en 1521. Todo el tiempo que transcurrió antes de esa fecha está enterrada en el suelo.
En cambio a Barcelona nunca nadie la ha borrado del mapa. Sus edificaciones romanas, góticas, etc. están ahí hayan o no sido restauradas. ESTAN AHI.

Medellín, a solas contigo

"Un bus me deja a mitad de camino. Por 30 centavos compro 15 minutos de paisaje. A la montaña subo a pie, jadeando de calor hasta coronar la cumbre. A la casa donde voy se entra por una avenida de rosas cuyos botones estallaron esta tarde al sol. Todavía, en el perfume del aire, mi carne percibe la cópula de la naturaleza.

La visión de la ciudad es espléndida desde esta altura. Puede pensarse en un paisaje ideal para místicos, pero aquí viven los industriales antioqueños.

Todavía no me tomé una copa, y ya estoy ebrio. La voluptuosidad del aire emborracha mis sentidos. Me niego a beber para conservarme lúcido, y gozar este paisaje fascinante tan parecido a la gloria. Para empezar, un jugo de moras.

Marina me enseña el nombre de las matas que crecen en su jardín: gardenias, alelíes, crisantemos y girasoles. ¡Qué derroche de belleza! No falta un color, y todos los aromas están presentes. Escandalosa lujuria de esta tierra donde brota el milagro por el amor de un corazón y unas manos de mujer.

Quisiera vivir en medio de este esplendor de fuerza, sol y poesía. Pero tal vez no. Esta violencia desencadenada terminaría por matarme, es demasiado inhumana. Mi alma también ama la pobreza, la aridez y las piedras. Mi dicha muere en el exceso. Y esta belleza es perfecta. La felicidad tendría aquí su reino, pero también una muerte melancólica. El corazón necesita ausencias para alimentar el deseo.

Nos instalamos en la biblioteca. Tomamos un licor seco, excitante, y estamos felices. Tras los vidrios una terracita sembrada de pinos semeja un balcón sobre un abismo que titila: ¡La ciudad!
Anclada en la oscuridad, chisporrotea con sus neones brillantes. El viento mece los árboles. El cielo centellea apacible. Me siento despojado de espíritu, vacío de ideas, sólo abierto a las embriagueces del cuerpo..."

Sacado de "Medellín, a solas contigo" Gonzalo Arango - Poeta Nadadista de Medellín

Obra negra. Santa Fe de Bogotá, Plaza & Janés, primera edición en Colombia, abril de 1993.

primer camino, primer punto de vista...

En cuanto a " la reflexión sobre la ciudad en transformación ", la visita en el corazón del centro histórico de la ciudad antigua de Barcelona, es decir a través del barrio gótico, el Born, el Raval me permitió darme cuenta de grandes similitudes con mi ciudad de origen; Lille (le nord pas de calais_ France). Sólo la intervención y la posición arquitectural de los proyectos urbanos contemporáneos en centro ciudad histórica son diferentes; al saber la relación al existente.
El desarrollo de Lille es hecho de manera concéntrica, evoluciando poco a poco desplazando las murallas de la ciudad medieval, y dejando rastros de su existencia a medida, tales La Rambla. Sin embargo no existe Cardo / Decumanus, que marca profundamente la composición urbana de Barcelona medieval, cruzándose la Plaza St Jaume que parece en mí entonces más bello e importante al nivel urbano. Lo mismo que tiene Lille, encuentra escalas de callejones equivalentes, que según su estatuto y su función, son más o menos estrechas, ofreciendo perspectivas cerradas y apretadas, resultados jamás sabemos a donde, con pasajes, pequeños plazas secundarios …
En el curso de la visita pudimos ver ejemplos ejemplares de concepción con existente, de un proyecto contemporáneo en centro histórico de la ciudad (ex:le mercado cubierto de Mirallès). En Lille el centro histórico tal, como está considerado como histórico de Barcelona "es cuajado", es decir que es completamente cerrado a todo tipo de proyecto puramente contemporáneo en su centro. Sin embargo reencontramos los mismos problemas muy interesante de "costura" de la ciudad nueva con la ciudad antigua, es decir de postura en cuanto al paso, el lugar del límite, entre el centro histórico y la ciudad nueva. Aquí a patio de la visita el primer bosquejo con proyecto contemporáneo de viviendas, de un plano urbano dibujado por "Mirallès", o el dibujo muy sensible permite la integración total del proyecto, en lugar de un prejuicio de estar en rotura.
Pues para concluir me parece que esta visita es una muy buena entrar en materia para reflexionar sobre nuestro tema de la ciudad en transformación.

new york

‘… Stillman nunca parecía ir a ningún sitio determinado y tampoco parecía saber dónde estaba. Y sin embargo, como obedeciendo a un propósito consciente, nunca salía de una zona estrechamente circumscrita, limitada al norte por la calle Ciento diez, al sur por la Setenta y dos, al oeste por Riverside Park y al este por Amsterdam Avenue. Por muy casuales que fueran sus recorridos –y su itinerario era diferente cada dia-, Stillman nunca cruzaba estas fronteras. Tal precisión desconcertaba a Quinn, porque en todos los demás aspectos Stillman parecía ir a la deriva.’

Paul Auster. The New York Trilogy. El Cuaderno Rojo, capítulo 8, página 69.

La ciutat vella, que bueno!

La cosa que prefiero cuando me paseo en este barrio (en el cual vivo), es descubrir siempre o redescubrir pequeños sitios, plazas al fin de tres cuatro calles estrechas. Es siempre un sentimiento agradable de desembocar en este género de plazas, respiración y “aportación” de luz en este barrio bastante denso y quien deja sólo poco espacio a la circulación y a los espacios públicos.
Cuando se pasea en estos callejones húmedos con una luz filtrada por los paños que se secan, el camino efectuado es en la inmensa mayoría de los casos guiado por el azar, por la curiosidad, por la luz. Teniendo en cuenta que el trazado bastante aleatorio de las calles y de la talla, es difícil de situarse o de dirigirse fácilmente sin conocer los lugares. Pero es esto también que participa a crear este ambiente particular de descubrimiento.
Es menos el caso en París, donde a menudo se marcha entre gran punto de referencia, dos grandes plazas o monumentos. Plazas que cuadriculan la ciudad con una malla muy apretado y compuesto de gran ejes.
Pero para volver a la vieja ciudad, particularmente me gustó esta visita y esta manera de trabajar sobre el sitio, siempre es más concreto de hablar de cosas sobre el sitio de las operaciones. Y más que todo, es verdaderamente tranquilo de no ser encerrado en una sala durante las tres horas, lo que hice demasiado tiempo durante el primer semestre, el caso es mejor tomarse un tiempo para visitar un poco. Soy un poco allí para hacer eso también.

pq caminar bcn

Estoy interesado en y el maneras diferentes que puedes explorar un ciudad, y el concepto de caminar, un manera que da un experiencia mas directo, con mas intimidad.. y la diferencia entre esta experiencia, y lo que tienes cuando estas en un coche..

el comienzo histórico

Qué mejor forma de empezar “una reflexión sobre la ciudad en transformación” que desde la propia ciudad vieja o Ciutat Vella. Fue un paseo agradable, lleno de pequeños descubrimientos que incitaban a seguir tal recorrido en busca de una Barcelona nueva (dentro de la vieja). El escenario no fue novedoso del todo pero sí su contenido (tres palabras sirven para que todo tenga sentido y forma), y por consiguiente el LUGAR. Los lugares, como tal, no surgen de la nada, hay que sentirlos, y la verdad es que el martes pude anotar unos cuantos de ellos en mi libreta.

Barcelona, una cuidad viva y latente desde su corazón. Toda transformación, entendida como intentos de mantener viva esa ciudad debilitada, pero con fuerzas de vivir y echar adelante. Cada intervención, a su debida escala, época y justificación responde a una ciudad contemporánea donde todo va cambiando. Me impresionó bastante cómo es a veces la ciudad capaz de absorber tales cambios con esa maestría como en el caso de allada vermell, que nace no hace mucho tiempo del vacio de una manzana del Born.

un comienzo histórico

Qué mejor forma de empezar “una reflexión sobre la ciudad en transformación” que desde la propia ciudad vieja o Ciutat Vella. Fue un paseo agradable, lleno de pequeños descubrimientos que incitaban a seguir tal recorrido en busca de una Barcelona nueva (dentro de la vieja). El escenario no fue novedoso del todo pero sí su contenido (tres palabras sirven para que todo tenga sentido y forma), y por consiguiente el LUGAR. Los lugares, como tal, no surgen de la nada, hay que sentirlos, y la verdad es que el martes pude anotar unos cuantos de ellos en mi libreta.

Barcelona, una cuidad viva y latente desde su corazón. Toda transformación, entendida como intentos de mantener viva esa ciudad debilitada, pero con fuerzas de vivir y echar adelante. Cada intervención, a su debida escala, época y justificación responde a una ciudad contemporánea donde todo va cambiando. Me impresionó bastante cómo es a veces la ciudad capaz de absorber tales cambios con esa maestría como en el caso de allada vermell, que nace no hace mucho tiempo del vacio de una manzana del Born.

otras ciudades y literatura : John Fowles y atenas

"Athens was dust and drought, ochre and drab. Even the palm trees looked exhausted; all the humanity in human beings had retreated behind dark skins and even darker glasses. At two in the afternoon city and citizens gave up; the streets were empty, abandoned to indolence and heat. I lay slumped behind shutters on a bed in the Piraeus hotel, and dozed fitfully.
...
We came over the pass of Daphne at about eight-thirty, with the last light over the pink and amber city, the first neon signs around Syntagma and Omonia like distant jewels."

John Fowles "The Magus"

1er camino impresiones -- commentarios barcelona/atenas

La verdad es que el centro antiguo de barcelona es lo que conozco mejor de la ciudad como vivo allí. Pero en ese primer camino apprendí cosas de la historia de la ciudad que no sabía antes. Lo que me gusta mas en esa parte son las capas existentes de las epocas en la imagen de la ciudad de hoy y como coexisten. Porque aunque ciutat vella es el parte mas antiguo de la ciudad, al mismo tiempo, le han cambiado muchas cosas para hacerlo más facil y attractivo para vivir en ello y visitarlo. La construcción de via layetana para hacer el transporte más facil ( que para mi no me parece mal, porque si quieres evitar el coche en el centro, tienes que crearle una otra transición), la plaza de Catedral, la plaza de San Jaume etc. Lo que me extrañó mucho es que hay algunos edificios que les transladaron de un punto de la ciutat vella a otro para hacerla más bonita.
Al otro lado atenas es muy diferente de barcelona. Aunque es una ciudad más antigua no mantiene tantas cosas de las epocas pasadas como barcelona. Durante los 4 siglos que estaba conquistada por el imperio otomano sufrió muchos catástrofes. Una gran diferencia entre barcelona y atenas es que barcelona es muy bien organizada, ordenada y diseñada. Al contrario atenas es más grande y caótica. Eso es por las grandes oleadas inmigratorias que recibió atenas dentro de muy poco tiempo, y eso resultó en un crecimiento explosivo y desordenado de la ciudad, con objetivo básico cumplir las necesidades de los nuevos ciudadanos de vivienda. Así el crecimiento de la ciudad no se hizo sobre algun plano urbanistico.
Amo, en las lentas tardes de verano, el sosiego de la cidade baixa, y sobre todo aquel sosiego que el contraste acentúa en las partes que el día bucea en el bullicio. La Rua do Arsenal, la Rua de Alfandega, la prolongación de las tristes calles que se arrastran hacia el este desde que la Alfandega cesa, toda la línea separada de los cables caídos. Todo esto me conforta de tristeza, me inserta en esas tardes, en la soledad de su conjunto.

Vivo una era anterior a aquella en la que vivo; gozo de sentirme contemporáneo de Cesario Verde, y tengo en mí, no otros versos como los de él, sino la substancia de los versos que fueron suyos.

caminar per barcelona

Pienso que el solo hecho de titularse "caminar bcn" ya es atractivo, al saber que se trata de caminadas orientadas por barcelona ya se hace mucho más interesante. Suele pasar que te interesas más de conocer otras ciudades, siempre es novedad, que conocer la nuestra propia, por suerte una de las buenas cosas que tiene esta carrera es que te despierta el interes de las cosas, y que mejor que conocer tu ciudad y poder disfrutarla. Saber y descubrir ese encanto que queda fuera del alcance de los cientos de turistas que corren cada dia por nuestras calles.

26 febrero 2007

Las otras ciudades: Londres


Y así fue como los tres salimos de aquel callejón sin salida que era Victoria Road y nos encaminamos al pub por calles tristonas y cargadas de ecos, dejando atrás parques sembrados de excrementos, la escuela victoriana con sus lavabos fuera, los escombros de los bombardeos –nuestros auténticos patios de recreo y escuelas de sexo- y cuidados jardines ante docenas de saloncitos de familias desconocidas con televisores que resplandecían con luz mortecina. Eva siempre había llamado a nuestro barrio “el abismo”. Reinaba un silencio tal que ninguno de nosotros se atrevía a romperlo con el sonido de nuestras propias voces.
Aquí vivían el señor Whitman, el policía, y su joven esposa Noleen; a su lado, un matrimonio de jubilados, el señor y la señora Holub. Eran socialista, exiliados de Checoslovaquia y no sabían que su hijo se escapaba de casa todos los viernes y sábados por la noche, de puntillas y en pijama, para ir a escuchar música infecta. Enfrente tenían a otro matrimonio de jubilados, un profesor y su esposa, los Gothards. Sus vecinos eran una familia del East End, comerciantes de alpiste, los Lovelace. La viejecita abuela Lovelace trabajaba en los lavabos de los jardines de la biblioteca. Un poco más arriba, vivía un periodista de la calle Fleet, el señor Nokes, con su esposa y sus obesos hijos , y los Scoffield –la señora Scoffield era arquitecta- por vecinos.
Todas las casas estaban “reformadas”. Una tenia un porche nuevo, puertas dobles la otra, ventanas “georgianas” o una puerta nueva con herrajes de latón. Se habían ampliado las cocinas, arreglado buhardillas, eliminado tabiques y construido garajes. Esa era la pasión de los ingleses: no el mejorar la cultura o el ingenio, sino el HTM, “Hazlo tú mismo”, la pasión por tener casas mejores y más grandes, con mayores comodidades, la concienzuda acumulación de confort y, con él, el status, es decir, la exhibición patente de un dinero ganado. Exhibir era lo importante. Cuántas veces, en ocasión de una visita a una de las familias del vecindario, antes de ofrecernos una taza de té nos habían hecho visitar la casa – “otro grand tour”, suspiraba papá- para que admiráramos habitaciones amplísimas, finísimos armarios, y literas, duchas, invernaderos y carboneras.

Tomado del libro:
El buda de los suburbios
Hanif Kureishi

Ciudad Vella

I think it's very impressive that Barcelona has such a big old city part. In Stockholm there is also 'an old city', but not as dominant as in Barcelona. In the 1960’s and 70’s areas of the old city in Stockholm were demolished because of the modernising. This is really a shame I think.
Walking in old cities are very interesting because it gives us a perspective of the history. When I walk in the old city of Barcelona I always discover new places and streets and it feels endless.

Santa Caterina mercado of Miralles works really nice in the old city I think. Wood is not often seen in Barcelona and I think it is nice that he has used that material. Moreover, It would have been interesting if the new apartments in the area behind the market were contrasting more rather than trying to adapt to the old style...but this is always a complicated discussion.
The plazas in the old city that have been evolved over time are quite nice spaces, allthough the plaza behind the Picasso museum lacks interaction with the surroundings. Too much of a backyard. There are other plazas that are nicer spaces such as the plaza by
Carrer dels Carder and also plaza del Pi that are curving arround the cathedral.
I think the main road Layetana has just far too much traffic and it would have been nicer if the old city were not divided so brutally like that.
The Rambla Raval that has been evolved due to demolishment of old buildings are just too big in scale I think. Finally, I think MACBA is a very successful building and nice contrast in El Raval and the surrounding is an active used space.

Sentidos

Fuimos paseando a traves un barrio que me gusta: por sus calles estrechas, por sus pequenas plazas, por los olores y colores. Lo que me da la intencion es que en este barrio, y en todo Barcelona, los habitantes se apropian los espacios exteriores: balcones con toda la ropa, las bicycletas, los ninos que juegan en la calle, los abuelos que hablan... Podemos desde la calle conocer la intimidad de la gente. Al contrario, en Paris, la gente es cerrada, se esconde.
Ademas, nos han preguntado a proposito del espacio detras del museo Picasso. En primero yo pensaba que este espacio no sirve a nada, esta muerto. Pero, pensando mas, me gusta este espacio. En effecto, en los barrios similarios mas o menos de Paris, no existe estos tipos de espacios porque todo esta explotado. No existe espacios "abandonados".
Para mi este espacio, me deja suenar; puedo imaginar cosas y por eso ma apropio en mi cabeza el espacio. Este lugar me da ganas de "hacer".... eso ma gusta.

Caminar Barcelona

Con un poco del espirito de Marco Polo:

"—¿Viajas para revivir tu pasado? —era en ese momento la pregunta del Kan, que podía también formularse así: ¿Viajas para encontrar tu futuro?Y la respuesta de Marco: —El allá es un espejo en negativo. El viajero reconoce lo poco que es suyo al descubrir lo mucho que no ha tenido y no tendrá."
(Ciudades Invisibles, Ítalo Calvino)

Quizás, como una manera de entender otras ciudades: Campinas (donde nací), São Paulo (donde estudio y vivo) y todas en las que ya estuve. Cada ciudad esconde una otra. Y cada uno de nosotros podemos encontrar en la Barcelona tantas Barcelonas más.

[Querría encontrar una de las mías. Compartirla y conocer las vuestras.]

¿Por qué 'Caminar BaRCeLoNa'?

A diferencia de la mayoría de los asistentes a esta asignatura (por lo que he podido ver hasta ahora), yo sí soy de Barcelona. Pero que no se me entienda mal, no lo digo en tono despectivo (¡faltaría más!) pero si es verdad que decir “soy de Barcelona” me enorgullece enormemente.
Si he de ser sincero, no es que haya dado muchas vueltas por el mundo (o no tantas como me hubiera gustado), pero habiendo visitado (y casi estudiado) ciudades y pueblos de CataluNYa, España, Europa, África, América y me atrevería a decir que extraterrestres… me quedo con Barcelona. Algunos dirán que es normal por ser mi ciudad natal, y quizás tengan razón. Pero si bien me he podido enamorar de otras ciudades y culturas (cosa que recomiendo enormemente) mi Barcelona es insustituible. He crecido y vivido aquí siempre, alejado del centro, pero a 10 minutos en metro, tengo el amor por mi ciudad como patria, hogar, y está siempre en mi corazón. Pero fue al crecer, al moverme por sus calles y plazas por mi propia cuenta (y a menudo bien acompañado y guiado), que descubrí tantos y tantos secretos de Barcelona; a menudo tesoros que nunca un turista verá, que incluso muchos habitantes (y enamorados de su ciudad (incluido un servidor)) quizá no habrán oído nunca hablar… espacios, rincones, sabores, olores y colores que si he de describir diré que producen pura magia en el corazón y en la mente.
Si bien puedo reconocer que mi amor y devoción son desmesurados, también quiero reconocer que mi Barcelona no suele ir acompañada de la imagen institucional que nos quieren vender políticos y farsantes, hay mucha más Barcelona que la que nos pretender vender o utilizar como moneda de compra-venta (política, más bien); la Barcelona de a pie, de la gente que hace de Barcelona la ciudad que es, las personas de toda la vida y los bienvenidos (como los estudiantes erasmus), etc. porque al fin y al cabo, una ciudad es las personas que respiran en ella.
Evidentemente, y no me quisiera alargar más, el pasado y la constante transformación son también esenciales (así como otros factores secundarios, pero no menos importantes, como el clima, la economía, el turismo,…) para una buena y saludable ciudad como Barcelona. Así que, después de divagarlo y entregar mi instancia en secretaría para hacer un cambio de matrícula, ya ando por Barcelona. Como siempre he hecho, porque es como se debe conocer una ciudad: andando; de día y de noche. Pero ahora, con la oportunidad de descubrir tanto de mi ciudad que no conozco, de compartir con amigos, compañeros de carrera y estudiantes extranjeros todo aquello que mi ciudad me hace sentir, y en definitiva, que me sirva para seguir creciendo y madurando... como hace mi Barcelona.

¿Porque caminar Barcelona?

A la pregunta que se nos ofrecen, creo que habría una multitud de respuestas posibles (como ya se exponen en este blog), pues cada uno tiene una historia que contar sobre esta ciudad y cada qual la vive a su manera. No podría generalizar sobre cual es el motivo concreto para pasear por esta ciudad; pero imagino que todo estamos interesados por la arte que ella desprende.
Barcelona es una de las grandes ciudades más valoradas internacionalmente, y esto hay que saberlo llevar. Me refiero, (y siempre hablando desde mi punto de vista), a que me daría mucha vergüenza si en el extranjero me pregutan sobre Barcelona y contesto con una Sagrada Familia, unas Olimpiadas 92, un Barça... hay miles de sensaciones que esta ciudad provoca, y todos ellos deberiamos experimentarlos, para poder compartirlos. Es esta la mejor manera que tenemos de ayudar y fomentar a una gran ciudad cosmpolita como Barcelona.

25 febrero 2007

Supongo que volver a caminar Barcelona por volver a redescubrir, para ver la ciudad desde otro punto de vista y con otras gentes con diferentes culturas. Para los que no somos de aquí la mirada es siempre un poco diferente, más desde fuera y seguro que diferente de la gente que siempre ha vivido en ella y aquí tenemos la oportunidad de que nos muestren Barcelona desde el punto de vista de la gente que ha vivido en ella, de la gente que ha visto su metamorfosis y transformación en una ciudad puntera y conocida y bastante fuera de sus límites.
Un estímulo para participar en caminar Barcelona fue también el saber que estaba dirigida a estudiantes de intercambio, como estudiante que el año pasado disfrutó de una beca Erasmus quería volver a revivir el estar rodeado de gente de diferentes países; volver a escuchar diferentes idiomas y sobre todo volver a aprender de los muy diversos y diferentes puntos de vista que siempre hay en una clase así.
Por todo esto y por hacer una clase al aire libre, algo que en esta facultad, aparte de dibujo, es algo imposible, decidí Caminar Barcelona.

Perquè caminar barcelona

Cuando era pequeña, Barcelona para mi era como una ciudad lejos de mi alcance, que sólo veía cuando iba al médico, visitar mis abuelos o alguna otra situación exepcional.
Cuando ya tenía unos trece años y ya podía coger el autobús que superaba la "gran" distancia que separa mi pueblo de Barcelona (que se recorre en 10 minutos. Bueno, un poco mas porqué ya sabemos como es el autobús...). Bueno, pues entonces Barcelona pasó a ser el lugar dónde aprovechaba para ir al cine, de compras i todo eso que no podía hacer en mi pueblo.
Ahora, a los 23 años, ya casi dudo de si vivo mas en Barcelona o en mi pueblo. Trabajo, estudio, salgo de fiesta, paseo, voy a exposiciones, etc en esa ciudad que, aunque no se ha movido, cuando era pequeña parecía tan lejos y ahora está tan cerca de mi.
Poco a poco Barcelona pasó a ser parte de mi de la misma forma que yo pasé a ser parte de ella, a convertirme en una habitante mas de esta ciudad. De la misma forma mi interés hacía ella fue creciendo. Empecé a leer libros, sobre Barcelona i a disfrutarla mas como ciudad. Eso sí, mis paseos y lecturas, prácticamente se reducían a Ciutat Vella.
Y,el día en que me plantearon hacer esta asignatura, pensé "porqué no salir de las murallas y empezar a conocer un poco mas?"